Guía completa para presentar una demanda por daños y perjuicios en Colombia

Guía completa para presentar una demanda por daños y perjuicios en Colombia

Cuando una persona sufre un daño injustificado —sea físico, emocional o patrimonial— la ley colombiana le permite presentar una demanda por daños y perjuicios. Este mecanismo tiene como finalidad reparar integralmente el perjuicio causado, restaurando los derechos vulnerados y compensando económicamente a la víctima.

En esta guía conocerás qué tipos de daños pueden ser reclamados, qué requisitos debes cumplir, cuál es el procedimiento legal y qué pruebas necesitas para presentar con éxito una demanda por daños y perjuicios en Colombia.

¿Qué se entiende por “daños y perjuicios”?

En el lenguaje jurídico, el daño es la lesión o afectación negativa que sufre una persona en sus bienes, derechos o integridad personal. Por su parte, los perjuicios son las consecuencias patrimoniales o extrapatrimoniales de ese daño.

En una demanda civil, los más comunes son:

  • Daño emergente: pérdida económica directa.

  • Lucro cesante: ingresos dejados de percibir.

  • Daño moral: sufrimiento psíquico, emocional o espiritual.

  • Daño fisiológico: afectación funcional o pérdida de calidad de vida.

  • Daño a la vida de relación: limitación en el desarrollo social o familiar.

¿Cuándo procede una demanda por daños y perjuicios?

La demanda puede presentarse siempre que se configure una conducta antijurídica que cause un daño cierto, evaluable y atribuible a alguien. Esta puede derivar de:

  • Un accidente de tránsito

  • Negligencia médica

  • Incumplimiento contractual

  • Actuación u omisión de una autoridad pública

  • Daño por producto defectuoso

  • Agresión física o psicológica

En todos los casos, deben acreditarse tres elementos fundamentales:

  1. Existencia del daño

  2. Culpabilidad o responsabilidad del autor

  3. Nexo de causalidad entre el hecho y el daño

¿Contra quién se puede presentar?

La demanda puede dirigirse contra cualquier persona natural o jurídica que haya causado el daño, incluyendo:

  • Particulares

  • Empresas (por ejemplo, EPS, aseguradoras, establecimientos)

  • Entidades del Estado

  • Profesionales (médicos, abogados, contratistas)

Si el daño se produce por culpa de varias personas, todas pueden ser solidariamente responsables.

¿Qué tipos de demandas existen?

En Colombia, las demandas por daños y perjuicios pueden clasificarse según el origen de la responsabilidad:

1. Responsabilidad civil extracontractual:
Cuando no hay contrato previo entre las partes. Ejemplo: un peatón atropellado por un conductor.

2. Responsabilidad civil contractual:
Cuando el daño proviene del incumplimiento de un contrato. Ejemplo: un contratista que entrega una obra defectuosa.

3. Responsabilidad del Estado:
Cuando una entidad pública, en ejercicio de sus funciones, causa un daño a un ciudadano. Ejemplo: una caída por mal estado de la vía pública.

¿Qué se debe probar?

La carga de la prueba recae en el demandante. Es necesario demostrar:

  • La existencia del daño con documentos, peritajes, testimonios o registros

  • Que el demandado actuó con culpa, dolo o negligencia

  • Que hay una relación directa entre el hecho y el perjuicio

En casos de responsabilidad objetiva (por ejemplo, por conducción de vehículo o ejercicio de actividades riesgosas), no es necesario demostrar culpa, solo el daño y el nexo causal.

¿Qué se puede reclamar?

El monto de la demanda dependerá del tipo de daño sufrido. Se pueden reclamar:

  • Gastos médicos y de recuperación

  • Ingresos dejados de percibir

  • Afectación emocional o psicológica

  • Daños materiales a bienes

  • Gastos funerarios (en caso de muerte)

  • Costos de cuidado, adecuaciones y apoyo

También se puede solicitar una medida de reparación simbólica, como la retractación pública o la adopción de medidas de no repetición.

¿Cuál es el procedimiento?

  1. Evaluación jurídica del caso:
    Se analiza si hay mérito para demandar y qué tipo de responsabilidad aplica.

  2. Valoración del daño:
    Puede requerir peritajes contables, médicos, psicológicos o técnicos.

  3. Redacción de la demanda:
    Debe contener los hechos, fundamentos de derecho, pruebas y pretensiones.

  4. Presentación ante el juez competente:
    Según la cuantía, se tramitará por el proceso verbal sumario o verbal ordinario.

  5. Etapas del proceso judicial:
    Incluyen admisión, contestación, audiencias, pruebas, alegatos y sentencia.

En muchos casos es recomendable agotar primero la vía directa con el responsable o la aseguradora antes de judicializar el asunto.

¿Cuánto tiempo tengo para demandar?

Los plazos dependen del tipo de responsabilidad:

  • Extracontractual: 2 años desde el hecho o desde que se conoce el daño

  • Contractual: 5 años desde el incumplimiento

  • Responsabilidad del Estado: 2 años según el CPACA

  • Seguro (acción directa): 2 años desde el siniestro

Es clave actuar dentro de los términos para evitar que opere la prescripción.

¿Qué pasa si hay una aseguradora de por medio?

Si el causante del daño tiene un seguro de responsabilidad civil, la víctima puede presentar la demanda directamente contra la aseguradora (acción directa), lo cual facilita la obtención de una indemnización efectiva.

En estos casos, es necesario revisar:

  • El tipo de cobertura

  • El monto asegurado

  • Las cláusulas limitativas

  • Las exclusiones del contrato

Muchas veces las aseguradoras ofrecen pagos muy bajos. Contar con asesoría legal permite negociar con mayor fuerza.

¿Es obligatorio tener abogado?

Para demandas superiores a 40 SMMLV (aproximadamente 52 millones en 2024), se requiere actuar con abogado titulado. Incluso en cuantías menores, se recomienda asesoría profesional para estructurar correctamente la demanda y maximizar las probabilidades de éxito.

¿Cuánto dura un proceso?

El tiempo puede variar según la carga del juzgado, la complejidad del caso y la actitud procesal del demandado. En promedio, un proceso de responsabilidad civil puede tardar entre 12 y 24 meses en primera instancia. Sin embargo, en algunos casos es posible llegar a un acuerdo anticipado.

Conclusión

La demanda por daños y perjuicios es una herramienta legal poderosa para restablecer el equilibrio jurídico roto por un hecho injusto. No se trata solo de obtener dinero, sino de lograr una reparación integral que reconozca el sufrimiento, las pérdidas y los derechos vulnerados.

En Repara Daños y Perjuicios analizamos tu caso con rigor técnico y compromiso humano. Si sufriste un daño y no has sido indemnizado, no estás solo. Estamos aquí para ayudarte a exigir lo que legalmente te corresponde.